Siempre habrá tiempo para volver...




... y cuantas naves cuantas velas seguiré

por cada fábula de mar que aún no sé.

(canción, Piero 1977)


Nada como regresar a la patria, a ese terruño donde se vivió la edad dorada de la vida, la patria cuyo verdadero nombre es Infancia: cuando el tiempo era intenso, la alegría el modo de ser, la amistad incondicional y el amor de los padres el salvoconducto a todas las travesuras.


Si hubiera que ponerle un slogan a La Ceja propongo el término "la acogedora", y que debe ser condición de un tambo, de esto pueden dar cuenta los miles de inmigrantes de los últimos 20 años que han encontrado en este valle un hogar y una ocupación. Si esos brazos de acogida han sido generosos con tanto extranjero, como no habrá de serlo con los propios hijos, con esos que desde niños los vió jugar y crecer en sus mangas y calles, con esos hijos que de grandes salieron a buscar una mejor oportunidad para sí mismos, para sus hijos y para ayudar a los padres y familiares que aquí quedaban (¿qué sería del país sin la ayuda de tanto compatriota que se arriesgó a ser extranjero y peor aún venido de un pais calificado allá de mala laya?).

Margarita ha vuelto a su tierra, no para quedarse por que ha de llevarse a su papá a pasear por Disneyworld y las playas de Flórida, para sentir ese amor fraterno que le dispensan sus eternas amigas, complices y alcahutes (en la foto con Marta, Nury y Patricia); para rememorar los tiempos del colegio, de las monjas y las compañeras; para ponerse al día de lo que ha sido de la una y de la otra, de sus triunfos y sus fracasos, de sus amores y desventuras; pero ante todo para recordar con afecto a quienes han hecho parte de esta historia de vida que en terminos generales arroja un balance de satisfacciones.

Juan va'llover



El hablar popular tiene el sabor de la vida diaria: En La Ceja y sólo en ella se acuñan las palabras olletear y triniar, de las que se hablará en otra ocasión, y la expresión de la que trataremos aquí, que es un de santo y seña de viejo parroquiano.
Los singulares personajes encaramados en el frontispicio de la capilla de Chiquinquira no son ningunos monjes franciscanos, son Pedro y Juan, mejor dicho san pedro y san Juan los apóstoles del Señor, lo evidencian las llaves que cuelgan de la mano de uno y el libro que sostiene el otro. Los personajes tienen una innegable pose de interlocución, el uno está en función del otro como dos actores puestos a representar una breve escena de un acto de comedia, o por lo menos así se lo creyó algún seudoautor de sainetes del pueblo, quien elaboró para el cuadro un breve libreto:

La tarde está clara y cálida y Juan quiere aprovecharla para dar un paseo y agregar uno o dos versículos a su Apocalipsis. El itinerario sería tomar por la Floresta bordeando la Pereirita para salir a la altura de la Guaira. Pedro lo ve tan entusiasmado que le apena ser aguafiestas, desde que el zarco le entregó las llaves la gente lo responsabiliza también de la lluvia; no sabe cómo decirle pero se atreve:
-Juan, va'llover-
El otro no se da por aludido y abraza decidido su libro, levanta la pluma de la mesa y mira por segunda vez por la ventana. Ha observado que por el lado de la Unión no hay asomo de agua, y como algo de profeta ha de tener el que escribe profecías, busca la puerta.
Pedro se va como sulfurando y otra vez le grita:
-Juan, va'llover-
-Las güevas Pedro- le responde tajante y se va.

N.B.: aquel dicho "Cuando san Juan agache el dedo" no se refiere a este Juan Evangelista, sino al Bautista, a quien la iconografía lo suele representar con el índice señalando arriba.

Instrucciones para un desvare


A la manera de los Consejos que Swift daba a la gente humilde de su pais para mejorar sus condiciones de vida, quiero dar unas sencillas instrucciones para salir de un apuro económino. Sólo aplican para circunstancias domésticas temporales y no como un plan de negocio de un curso de empresarismo. No busca hacer rico a nadie sino salvar la situación de calamidad con dignidad y trabajo. Los casos son tan cotidianos como impostergables: pago de impuestos y servicios públicos, pago de la pensión de los niños o del semestre de la universidad del hijo mayor, cancelar el alquiler de la casa o de la hipoteca, y otros consejos de segunda instancia cuando se trata de eventualidades como los gastos de una enfermedad imprevista que no cubre el seguro, la cancelación de un embargo, una extorsión o un secuestro, Dios no lo quiera.

En la linea de consejos de primera instancia para salvar las finanzas domésticas procedase así:
  • Pongase un aviso en la ventana, con letras grandes y buena ortografía, que diga como el de la foto "Se arrienda pieza" agregando el número del teléfono. Divulguelo entre sus conocidos y hágalo saber en las instituciones públicas donde trabajan profesionales que vienen temporalmente de Medellín o de otra parte.

  • Reuna a todos los residentes de la casa y orientelos en la cultura de la hospitalidad, repasando el protocolo para saludar, responder y agradecer.

  • Acomódese los residentes de manera que se libere una buena habitación para el huesped. Conviene que su ubicación no quede cerca a la cocina. Si tiene niños pequeños procure calmar rápidamente sus berrinches y si son mayorcitos pídales que bajen el volumen al regueton, siempre y cuando el huesped este presente.

  • Advierta que la cama no chirree, ni se le caigan las tablas, que no falte el nochero y si tiene lámpara de caperuza sepa que mejora la categoría. Disponga de fundas y sábanas nuevas, toalla y jabón como en los mejores hoteles y las mejores cortinas. Todo esto sin dejar de estimarlo en la factura de cobro.

  • Ofrezcale el servicio de alimentación, especialmente el desayuno y la comida, y no repare en la cantidad y en ofrecer el tintico si su huesped es del sexo masculino, y que no le falte la servilleta y una frutica si su huesped es una fémina.

Los consejos de segunda instancia tiene por condición un verdadero talento culinario, no para platos sofisticados sino para comidas que tienen la fuerza del gusto generoso y práctico del antioqueño. Estos consejos son asuntos que se han de tratar en la sección de Guisos y Bebedizos de este mes.

Sala de exposiciones


Por estos días se abre una exposición de arte moderno de la segunda vanguardia cuyo tema es el tiempo: el intangible cuya única manera de "verlo" es a través de la sucesión de fenómenos que podemos observar, o por la huella que estos dejan, como el polvo o la mancha del viento o la lluvia. Estas formas en que el Tiempo se manifiesta han intrigado a los artistas de todas las épocas y aunque es un concepto muy difícil de atrapar, en esta exposición han encontrado una rica y variada manera de representarlo.
La exhibición presenta dos lineas plásticas: una que recurre a la iconografía tradicional de los hogares cejeños y otra a los objetos domésticos caidos en desgracia. Las obras dan cuenta de la profunda reflexión de estos artistas anónimos, cuyo tema ha sido también la inspiración de las máquinas del tiempo del joven artista Uriel Mauricio Rios. La crítica ha señalado la influencia de los ready-made de Marcel Duchamp con un tratamiento sutil y personal que evidencia el impacto del tiempo inmisericorde con la lozanía de la juventud e indiferente ante el desmoronamiento de los valores.
En las obras que exhiben el derrumbamiento de aqellos tiempos cuando el Corazón de Jesús gozaba el privilegio de estar en la pared central de la sala, cuando San Martín de Porres que junto a San Cayetano (del que creí siempre que también era negro) tenían un altar tutelar en la cocina, cuando Don Bosco era el patrón de la juventud pobre y abandonada. Aquellos tiempos sufren en esta exposición una vuelta, un giro, un tornado que los deja maltratados, manchados, ajados, rasgados, con el marco quebrado y los vidrios rotos, con el desprestigio de haber sido alabados con ramos y hoy ser contado entre los malechores. Esta exposición revela unas grandes verdades de nuestra sociedad, una verdad escrita con el lenguaje de las cosas y por unas manos que no son las nuestras, una verdad que es advertencia y que es preciso traducir a este lenguaje verbal para bien de la historia.
De los ready-made, de los objetos cotidianos tocados por el tiempo, no se hablará aquí para no desanimar a la gente. La exposición está abierta de lunes a viernes en la galería "Claje la Ceja" en la carrera 18 Nº 17-47.

Instrucciones para un desvare 2

El mercado de estos suculentos productos de la cocina antioqueña está asegurado: La morcilla y el tamal caen bien a cualquier hora, cualquier día y en cualquier parte. En primer lugar haga una lista de posibles clientes, de esos que conocen el valor de la cocina casera, calcule la cantidad de libras o unidades que puedan dejar, hay gente que compra y reparte a la casa de la mamá o de la suegra. Considere que esta oferta es rentable para una producción mínima de 60 libras u 80 unidades respectivamente.

Estas primeras indicaciones son válidas para la preparación de ambos platos:

Cocine con leña y en paila grande en el patio de atrás. Del ahorro de energía ni se diga, el sabor a leña es un sello de buen gusto.
Si con el personal de la casa no es suficiente consígase una persona bien baquiana para que le ayude y acepte el pago en especie.
Disponga de todo lo necesario: repase lista en mano la receta y los utensilios. Acondicione los espacios para las operaciones y la movilidad.
Aunque sea la primera vez, que todos adviertan que usted sabe lo que hace. Imprímale a su voz un tono emotivo que todos acatarán como voz de mando.

Si el caso es la preparación de morcilla considere las siguientes recomendaciones:
Compre un menudo completo de buena procedencia de tripa más bien delgada. Fíjese también que el arroz sea de buena calidad.
Lave escrupulosamente las tripas con harto limón injerto y al agua mezcle una pequeña dosis de hipoclorito de sodio. Tenga presente que en la degustación nadie recuerde la procedencia del bocado.
El sofrito de los gorditos picados del menudo es realmente el toque secreto del sabor.
La cebolla, que debe ser junca de los solares de este pueblo que dan el tallo delgado, debe picarse muy menuda y con afilado cuchillo.
El arroz obviamente debe quedar esponjoso y sazonado con ajos..

Si el caso es la preparación de tamales considere esto:
La selección de unos buenos insumos es determinante para la calidad del producto.
Escoja las mejores hojas de achira, cuide que no estén viejas, quebradizas o quemadas.
Al comprar la carne, previa elección del tipo de presa que va a poner al tamal, ponga mucho cuidado cuando le cortan el tocino, la pierna de cerdo o la carne de res, y no se vaya dejar meter chimbos y gordos. Cuéntele al carnicero qué es lo que quiere y prométale que en esos días le lleva una pruebita.
La elección del maíz y las verduras es trascendental. Váyase a comprarlos a la plaza donde los pueda oler y tantear. Se han visto casos que por economizar en maíz se pierde toda la inversión. Hay que decirlo para no pecar por omisión: Jamás de los jamases se le ocurra reemplazarlo por arroz, punto.
No cocine el maíz en olla a presión que lo pone mazacotudo, en la misma paila y a leña.
Muela el maíz y revuelva en la tolva cebolla de rama y cilantro. Guise, agregue sal y color al gusto, y amase hasta que adquiera una consistencia elástica.
Ponga tres carnes por tamal: pollo y cerdo de base, varíe la tercera entre costilla, tocino y res. Que las verduras le den armonía de color: reparta bien la papa, la zanahoria, la habichuela (es opcional) y la arveja, si lo que mandaron fue alverjas écheselas.
La cocción en una paila con 40 tamales dura 2 horas.

Última instrucción: Nunca haga esta oferta a los mismos clientes antes de dos meses. Primero que usted ofrecerles, que ellos lo soliciten. Y ante todo, no les de motivo para imaginar que en su casa se están pasando necesidades.

Puerto de universos


A Carlos Mario Londoño

Las bibliotecas solían ser lugares lúgubres llenos de mamotretos y amarillentos libros que en las más de las veces servían a los estudiantes para despachar tareas antes que para el disfrute de la lectura.

Con el desarrollo tecnológico, esta era de la información y la comunicación se convierte en una segunda Ilustración. El enciclopedismo es ahora renovado por la web permitiendo con la interactividad superar la apatía por el conocimiento promovida por los malos profesores y peores instituciones. Este aporte de la tecnología de la electrónica digital y los sistemas de información, aunada con los criterios arquitectónicos de espacio y confort con que se diseñan y construyen las nuevas bibliotecas, hacen que este puerto del conocimiento nos permita zarpar con un libro, de esta tierra que nos atraca, hacia mundos insospechados y maravillosos, al reino de la verdad y la fantasía.

En estos tiempos que no dejan de ser difíciles, cuando sigue siendo esquivo el lujo de un libro propio, es reconfortante encontrar una sala de lectura como la de la biblioteca de Comfama donde se siente un cierto calorcito, y no de la chimenea que aun no se enciende, como si el de la compañía de tan selectos libros, de tan buena edición y presentación, que es inevitable pensar que con esa máquina de papel en las manos, tengamos la posibilidad mágica de viajar a los tiempos míticos de la Odisea, a los misteriosos del Asno de Oro, a los épicos de Mio Cid, a los dantescos de la Comedia, a los caballerescos, a los quijotescos, en fin, a las miliunochescas historias de héroes, villanos e hidalgos; y que al final de ese sueño donde fuimos alguna vez caballeros derrotados, podamos volver reconfortados a la dura realidad y seguir ejerciendo,heroicamente, el destino de un humilde pastor de cabras.

Pedestal para un héroe



Este Blog: La Ceja de tantos, tiene el privilegio de abrir la Convocatoria para la propuesta de levantamiento de una estatua sobre el solitario pedestal del parquecito de los Marginales (al margen de la Pereirita) en la carrera 17 entre la 19 y 20.
Para tal ocasión se determina el siguiente Protocolo:
  • Descripción: Un pedestal sin estatua es como un cuerpo sin cabeza, un monumento a la dejadez, un desprecio a la memoria, una desatención a la vida misma. Este parque merece una imagen que consagre su espacio y que la identifique cual carta de ciudadanía. El tiene ya su sello distintivo, su carácter lo da su ubicación al margen del rio y al pié de la plaza de mercado, está en el lindero de lo urbano y lo campestre, en la frontera, como debatiendose entre la civilización y la barbarie. Este carácter de ambigüedad parece ser la posición de muchas de las personas que lo frecuentan, parece que cantaran a ritmo de hip-hop no soy de aquí ni soy de allá y da la impresión que también se debaten entre la libertad y el ostracismo, en el filo de la incomprensión y el rechazo. Lo cierto es que allí nos sentimos cómodos los holgazanes y pedigüeños, los gamines y vagabundos, los indigentes y rebuscadores; esto ha sido desde que nuestra memoria recuerda cuando la feria tenía un balcón de albergue para todos ellos, a más de circos y ciudades de hierro, en ese mismo sitio hoy la atracción es de conciertos de jóvenes metaleros y raperos, siempre marginales. En este marco conceptual se pretende enfocar la propuesta escultórica que cubra ese vacio de reconocimiento de la gente que lo frecuenta, que signifique las coordenadas de inclusión de los marginales, que simbolice un guiño de memoria para los olvidados.
  • Participantes: Pueden enviar sus propuestas todos los cejeños con más de quince años de habitarla o frecuentarla, de cualquier profesión o sin ella, que ame los espacios públicos, y ante todo, que su amor a los pobres y humildes sea sincero.
  • Requisitos: Por el carácter conceptual de la convocatoria no se exige la presentación de un modelo a escala, por tanto no es requisito ser artista plástico. La sustentación si debe dar las especificaciones de la obra. La propuesta debe redactarse en una extensión máxima de una cuartilla, documento Word/Arial 12. Enviarse al correo electrónico del blog lacejadetantos@gmail.com
  • Criterios de Evaluación: El jurado lo conforman un equipo interdisciplinario en el que participan un artista, un antropólogo y un poeta. Cómo pautas han determinado su preferencia al figurativismo para evitar la especulación abstracta, más no la ambiguedad inherente a la obra de arte. La naturaleza del material debe armonizar con la figura así como la relación de la altura con el pedestal debe conjugar la proporción con los árboles del entorno. Finalmente sobra advertir que las alusiones patrióticas y religiosas están fuera de lugar, así como las figuras recurrentes de la flor, la vaca y la bicicleta.