Instrucciones para el mutuo elogio

Si le importa mucho el reconocimiento porque su autoestima requiere del aplauso, las felicitaciones y las reverencias de los demás y considera que por hacer las cosas bien tiene merecido el título de benefactor y el mundo debe saberlo; tome en cuenta estas instrucciones, frutos de la observancia de cómo nuestros líderes le echan una travesía al éxito.

Como estamos en la era de la imagología, donde la palabra vale menos que la imagen hipnótica, contrate un asesor de la escuela de JJ Rendón y un fotógrafo para que capte los momentos culminantes de sus presentaciones publicas. No olvide nunca ubicarse en el centro del cuadro y sonreir siempre; lo demás se logra con maquillaje, photoshop y montajes.

Haga buenas migas con los medios de comunicación y procure decir la última palabra. Con la oposición pose de liberal y páguele algún patrocinio con la salvedad de la suspensión unilateral del contrato. Si termina peliando con ellos edite su propio periódico, porque en un pueblo sin Opinión usted mismo tiene derecho a crearla con la ilusión de ser la voz del pueblo. Tenga cuidado con que aparezcan sus créditos en el comité editorial y en los artículos. Que su fotografía persista en la memoria de la gente y para que no se note cierto narcisimo publique también las fotos de otras personas del pueblo dando testimonio de sus obras, con la versión ilustrada de un miembro de su equipo. No deje de publicar periodicamente los resultados de una encuesta contratada por usted mismo sobre la favorabilidad de su imagen, con el cuidado de que los resultados siempre esten por encima del 70%, ya que por debajo se considera desfavorable, y este no era el objeto del contrato.

Para los eventos públicos no deje de contar con su comité de aplauso; qué digo comité, sea emprendedor y atrevido y conforme su propia corporación de aplauso, donde acudirán sin falta sus obligados benefactores, otros cuantos a su servicio, algún iluso y algotro pegado que nunca falta en este pueblo.

Y si a veces llegan cartas con olor a rosas que si son fantásticas no deje de publicarlas por más insignificantes que parezcan, todo ello como muestra de la pleitesía que le rinden. Sobre todo aquellas cartas que después de unas felicitaciones en mayúscula recen con una cadena de palabras en ascenso de optimismo: crecimiento, embellecimiento y fortalecimiento. Y que dejen sentir que el mensaje de gratitud brota espontaneamente desde lo más profundo del corazón y rematen el rosario de bendiciones con un conmovedor Dios le pague.

Un Cronopio actuando el papel de sí mismo

La sociedad del semáforo: Las sombras de la ciudad
Por Henry Posada

La sociedad del semáforo es la película colombiana con mayor cantidad de premios en su etapa de desarrollo; narra la historia de Raúl Tréllez, un desplazado chocoano con incipientes conocimientos en ingeniería eléctrica, que trabaja como reciclador en Bogotá y está empeñado en la idea de crear un mecanismo para hacer durar el semáforo en rojo el tiempo que quieran los vendedores, malabaristas y lisiados que allí se ganan la vida, de tal forma que se puedan montar actos más largos.

I. Mi amigo el escritor y crítico de cine, Hugo Chaparro V., estuvo por estos días observando el rodaje de La sociedad del semáforo, la ópera prima del cineasta Rubén Mendoza y me vio en el plató donde soy Santiago el poeta; con algo de sorna me dijo: pero si eres el mismo Henry. Sí, le respondí, aquí todos somos los mismos. Recorrí entonces los rostros de Romelia, Abelardo, Alexis, Gala, algunos de los protagonistas de La sociedad del semáforo y todos son los mismos, se reinterpretan a sí mismos.

Cuando se presentó la convocatoria para el casting el año pasado me sedujo su eslogan: “actores de t.v. a metros” y en el vídeo que convocaba aparecían rostros de verdad, la gente que cotidianamente veo en cualquier ciudad de este alucinante país: ñeros, vendedores de nirvanas y paraísos, putas emperifolladas, embaucadores, transvertidos, culebreros, choferes de buses, peluqueros, milagreros del club del indio amazónico…la delirante fauna humana que quien camine por las abigarradas calles de Bogotá ve en cada esquina como estampas goyescas. Fue esto lo que me sedujo e inmediatamente salí en mi bicicleta amarilla rumbo al parque Nacional. No me equivoqué, aquello parecía El sueño de las escalinatas de Jorge Zalamea.

Frente a una cámara me pidieron vender una cobija, la que imaginé de esas de lana con indios Pielrojas en sus bordes que me cobijaron en la infancia, además me despaché contra todo: la iglesia, el estado, la familia. Salí pensando: fracasé de nuevo.

Transcurrieron casi tres meses y cuando mi sueño de salir del anonimato al desprestigio en una película nacional se había esfumado, sonó mi teléfono. Al director le había gustado, según me dijo después, mi mala leche, la manera de soltar esputos sanguinolentos contra el establishment, la convicción de ser el éxito del fracaso, el inútil de la familia, como escribió espléndidamente, Jorge Edwards.

II continúa en:
http://www.omni-bus.com/n29/cine.html

Otro Cronopio desde el Carare

Uno de esos "seres verdosos y húmedos" nos envía un texto desde las estribaciones del Carare, desde donde emprende su vuelta a este pueblo tras la promesa del primer encuento de Cronopios.

"Vida de cronopio, dices. Verás. Muchos caminos. Serpentear en los valles donde los ríos suelen ser caimanes extenuados, tirados como troncos muertos, cadáveres de la modernidad, como esas otras montañas que están cerca, asediadas por la motosierra, espulgadas por el hambre de los arrieros y la codicia de quienes trafican las maderas de sus entrañas. En estas montañas el serpentear es más agudo, y en más de una ocasión termino borracho de curvas, paisajes y cambios súbitos de aire. Llego entonces a las posadas. Posadas, casi nunca hoteles, aunque tengan aire acondiconado, ventilador, a veces agua caliente, ventana y el infaltable monstruo del televisor. Posadas solitarias, donde el aburrimiento es infinito. Casi siempre semejan celdas, en otras un pequeño cielo tímido se asoma por los pequeños ventanales, y en otros, cercanos a alguna plaza principal de un pueblo, el arrebato nocturno amenaza con carcomer la noche: músicas del rencor, esa mezcla moderna de corridos y fábulas de vaqueros venidos a narcos, que en un ambiente ensordecedor invitan al vómito y a la infamia. Las detesto pero las ignoro rápido por mi desdén de cronopio. Pienso mejor en los ríos como caimanes, en sus ojos augustos mirando los cerros. Me voy con ellos, en sus lomos borrosos, al mar, a continuar los recorridos que el día truncó...de repente me hallo entre gaviotas, en la cubierta de un pequeño barco sin nombre, nombrando los planetas de Huidobro, imaginando el humo largo del cigarro de Cortázar, donde alumbran estrellas y donde el infierno es distante. ¡Es cierto amigo Cortázar, estamos en el infierno pero él es distante!!!

Jorge David Higuita, Septiembre de 2010, Montañas del Carare-Opón, Colombia, Suramérica.

Plantón por la Paz

Una lectora nos hace el siguiente y emotivo (así en mayúscula) comentario sobre el artículo "Plaza de matadores":
"... HASTA CUANDO VAMOS A TENER QUE SOPORTAR QUE UNOS CUANTOS MALANDRINES, QUE SE PASEAN COMO SI NADA POR NUESTRAS CALLES, SIGAN MATANDO Y MATANDO A LA GENTE BUENA DE NUESTRO PUEBLO???

QUE SERA LOS QUE LE HACE FALTA?, EDUCACION?, NO..... CARCEL?, TAMPOCO...LO QUE HACE FALTA ES QUE OTRO SIN CORAZON NI SENTIMIENTOS, COMO ELLOS, SE LES ENFRENTE Y LOS ACABE DE UNA VEZ POR TODAS; O QUE MI DIOS, TODOPODEROSO SE APIADE DE NOSOTROS Y SE LOS LLEVE PRONTO PARA BIEN LEJOS DE ESTE MUNDO..."

Antes que soluciones con escuadrones de la muerte, cuya infamia hemos padecido muchas veces y nunca más debemos permitir su reincidencia, y menos aún esperar el fuego fulminante de un Dios castigador, preferimos sumarnos a la convocatoria del primer PLANTÓN POR LA PAZ convocado por la Fraternidad Juvenil Cejeña para hoy 24 de septiembre, siempre que el Secretario de Gobierno, que según ellos "piensa que ésta actividad puede poner en peligro la "paz" del municipio y por eso es necesario consultarlo en un Consejo de Gobierno y se debe enviar la respectiva propuesta por escrito."

Esperan que el permiso sea concedido para realizar el PLANTÓN POR LA PAZ el viernes 1 de octubre. Para la evolución de esta noticia visitar el siguiente enlace:
http://www.facebook.com/home.php?#!/profile.php?id=100000598200012

El Juego de la amistad

En el Poblado se le apuesta a la amistad cada vez que se tiran las cartas sobre la barra, arriesgando sólo monedas con la resolución de un trago de aguardiente en salud de los amigos. Es un juego cerrado surtido de emociones, jamás con un as bajo la manga. Aunque pongan una cara de poker que farolea tener una flor imperial, tan sólo se esmeran en armar una terna o una escalera de color y se afanan mejor por hacer un comentario gracioso que los salve del silencio. En este juego de malicias estos amigos saben más por viejos que por diablos.

Y si la vanidad de la inteligencia desea imponerse sobre el grupo, se oferta un duelo de amigos y el par se enroca en un rincón del café para enfrentar sus 16 trebejos en el tablero de escaques. Ya no por azar sino por esfuerzos de la razón, la relación del juego se sostiene en los pasos certeros de las piezas, ganando material y avanzando posiciones para alcanzar el reino. Si bien con fuerte estrategia o débiles tácticas, con ataques y capturas, con ventajas posicionales y con jaques y hasta mates, esta amistad se consolida porque se saben que también ellos son piezas de un Dios que los mueve y los enfrenta con las mismas contrariedades de la vida, en las negras noches y en los blancos días.

Plaza de matadores

Ahora que este pueblo se ha convertido en una ciudad grande, los hijos de Caín la han llenado con sus vicios.

Esta plaza de La Ceja que era tan apacible como un potrero de vacas holstein y un dulce de leche, hoy cuenta con un cartel de matadores que la han convertido en una plaza de muerte y de salobre sangre, con la muda aprobación de un público que mira impávido la matanza en la arena; y una que otra vez, por aburrición o compasión, gritamos cobardemente desde la tribuna o tras el burladero un ¡ole! y pedimos una oreja a la presidencia de la corrida.

A estos matadores les mueve la codicia de los dineros ajenos y los mantiene la pereza de adquirirlos por esfuerzo propio, envidian llevar la buena vida de los otros agregándole gula y lujuria y se inflaman de soberbia de no consentir tener menos que ellos para juntar con ira un capital de rencores. En el cartel de matadores que ha contado La Ceja en su historia de infamias recuerda los nombres de "Pitoloco", "Zapatico" y "Montecristo", quien no ha sido ningún "Niño de la Capea" y que en el manejo del machete y la navaja no hay un "Espartaco" que se le iguale. Entre los picadores, banderilleros y mozos de espadas, que esperan su turno en el callejón, el cartel suma los nombres de "Teletubies" y "Tesorito", tiernos nombres que sólo un tonto podrá confundir con "El Juli" o "Joselito".

Pero esto no es un ocioso juego de asociaciones tauromáquicas, es una imagen de lo que es o podrá ser la sociedad cejeña si termina por aceptar este circo de asesinatos e impunidad. Luego de comentar la forma de la estocada, los paroxismo del chisme olvidan el sentido de pésame y se ocupan en triniar el cortejo de mozos y de mulas que arrastran al muerto, a la espera de la próxima víctima y las circunstancia de la faena. La Presidencia concede las orejas salvando responsabilidades con la promesa de una millonaria recompensa y hace fuerza para que otra faena de matadores no les ague la Fiesta del Toldo y de las Flores. El público vuelve a las calles con ese caminar particular de torero, apretando el culo, con estilizada indiferentcia y temeroso del asalto. Nadie se anima en este pueblo a convocar una marcha de protesta contra los asesinos, más fácil para la vanidad es convocar a una cabalgata de caridad burguesa en beneficiencia de los niños maltratados y perpetuar el ciclo de violencia e ineptitud.

Clásicos Antioqueños

En este tiempo en que la Fiesta del libro y la Cultura en Medellín se ocupa de los Escritores Antioqueños valga hacer memoria de esta autor clásico contemporáneo de la Literatura Antioqueña que no sólo nació en La Ceja en 1946, sino que llevó fatalmente la marca de la montaña y el campo cejeño impresa en el alma como lo constata el poeta brasileño Geraldino Brasil con estas palabras:

«Su gran poesía es urbana. Entonces para que sea tan fuerte, para que lo que usted vio lo hubiera impresionado tanto, creo que habrá nacido en una pequeña ciudad del interior o en una hacienda o en cualquier lugar en los alrededores de una pequeña ciudad. Porque sólo un niño nacido en los campos, alcanza a hacer una poesía urbana tan densa, captando tan bien y con tanta solidaridad humana, el enorme dolor de las calles y de las casas».

La Muerte del Deseo
En la nueva era de su triste libertad
cuando ha sido encerrado el deseo
la libertad estorba
y una señora lenta trae a tandas la muerte
servida con sus adornos antiguos.
La muerte del deseo es un actor
sin más escenas.
Es un tendero con los estantes vacíos
parado en ese mostrador de la costumbre
montando guardia,
en esa esquina sin clientes
apoyando la cabeza
sobre el pesado transcurrir
del desconsuelo.

Fervor por el Tango

Fotografía Jorge David Higuita
Fervor Por El Tango

Un movimiento Libertario

Para advertir sobre los peligros de las dominaciones, los engaños y las tiranías que presenta la autoridad en las mil versiones de orden político, económico y religioso, se funda este movimiento que actúa con versátil contundencia en diferentes frentes del batallar cultural. Recuerda algo de los movimientos de trasgresion juvenil del romanticismo alemán, del prerrafaelismo inglés y del surrealismo francés; como a ellos a éste le anima un sentimiento poético de rebeldía, una fuerza expresiva de emoción músical y el criterio intelectual para enfrentar una realidad miserable y materialista. Es un Enfant terrible que propone otra óptica para mirar el mundo a través del cine independiente, otro sentir y expresar en conciertos y talleres musicales, otra manera de traficar con libros libertarios y de confabular en fanzines y redes sociales.


Tiene por emblema un violinista trazado con la fuerza expresiva de un picasso de la época azul y por nombre "Pigua" acaso en alusión a la temible langosta: o insecto que arrasa comarcas o crustáceo hundido en alta mar; ambigüedad que acaso señale el rasgo de u
na personalidad que se debate entre la estridente transgresión del rock y los profundas melodías del pasado. Su eslogan podrá ser "exponer y proponer, mas no imponer", pero el oxímorom de su dualidad es una ruda/dulzura. La mayor extrañeza es que su mística, su disidencia y su resistencia suele cargarse sólo en dos hombros y se trama y se konstruye en una sola cabeza que juega a ocultarse modestamente en anagramas.

Para descifrar éste enigmático movimiento el lector podrá indagar las siguientes pistas:

Septiembre de asesinos

¡Diles que no nos maten! Anda, ve a decirles que no somos ningunas ratas sucias. Que si es cierto que consumimos bazuco y hasta hacemos una que otra vuelta contra algún cristiano, tampoco es motivo para que nos maten...

La noche mortal
"Aprovechando el descuido de alguien que dejó abierta la puerta, de escasos 50 centímetros de ancho, un grupo de hombres armados ingresó a las 11 de la noche del pasado viernes a un inquilinato del barrio Palenque de La Ceja y asesinó a cinco personas. Después de atravesar un corredor estrecho y oscuro, los desconocidos llegaron hasta una de las habitaciones ubicada cerca a un patio y sin decir nada dispararon contra María Francisca Bedoya, de 36 años y su hijo Jorge Iván Bedoya, de 19, quienes desde hacía un año pagaban 1.400 pesos diarios por dormir allí. En la misma habitación fueron asesinados Nicolás Andrés Montoya Ramírez, de 21 años; Francisco Javier Grisales Bedoya y Luis Alfonso Zapata Cardona. Momentos antes de llegar hasta ese lugar, el mismo grupo de desconocidos había asesinado a los ayudantes de construcción Gerardo de Jesús Castro Sucerquia, de 31 años y a José Otoniel Ciro Ciro, de 32, quienes se encontraban en dos piezas de otra vivienda situada a escasa media cuadra del inquilinato."

Los Testigos
"Las demás personas que a la hora de la incursión armada dormían en el lugar dicen que sólo sintieron la balacera, pero que no se dieron cuenta ni del ingreso de los pistoleros, ni de cuántos eran. El hermano de una de las víctimas afirma que al inquilinato sólo entraron dos hombres, pero el comentario de otros pobladores del barrio Palenque es que hasta el sector llegaron ocho personas, todas encapuchadas, quienes para movilizarse habrían utilizado una camioneta Toyota cuatro puertas roja y una motocicleta.

Palenque, ubicado a unas cuatro cuadras del parque principal de La Ceja, es conocido como la zona de tolerancia de ese municipio del oriente antioqueño. En ese sector habita gente en su mayoría humilde. Sus habitantes y los del resto del municipio también lo identifican como un expendedero de droga y por ello a un familiar de una de las personas asesinadas no le extrañó que su hermano hubiera muerto allí por ir a comprar basuco."

Las opiniones
"En La Ceja, una localidad tradicionalmente tranquila y reconocida por sus hermosas plantaciones de flores para la exportación, nadie tiene el recuerdo de una matanza parecida. Sin embargo, muchas de sus gentes coinciden en señalar que la masacre del pasado viernes y otros hechos similares sucedidos en los últimos días fue una acción de limpieza social. Sin recelos, algunos parecen aprobar estos hechos violentos porque en el pueblo hay mucho vicioso y si no se hace nada vamos a tener que desocupar todos, dicen. "¿Le parece muy bueno que usted salga por las mañanas a trabajar y le quiten hasta los zapatos?", pregunta un habitante de La Ceja, quien no muestra sorpresa alguna por el asesinato colectivo. Argumenta que los atracos se habían convertido en el pan de cada día y que por obra de la limpieza social, en los últimos días ha disminuido en algo la inseguridad en esa población.

En el barrio Palenque, en otros sectores de La Ceja y en las propias casas de los familiares de los muertos, reconocen que ellos consumían droga, "Pero la vida la entregó Dios del cielo y él mismo la debe quitar", señala Ramón Antonio Ciro Ciro, al rechazar que hayan asesinado a su hermano."


Casos 3
"El 27 de septiembre de 1998 fueron asesinadas aproximadamente siete personas en el barrio Palenque, municipio de La Ceja, Departamento de Antioquia al parecer por un grupo de justicia privada denominado "Limpieza Social". La Fiscalía General de la Nación profirió resolución de acusación contra nueve sindicados y actualmente el proceso se encuentra en etapa del juicio. En otro proceso por los mismos hechos, la Fiscalía vinculó a otras once personas que se encuentran detenidas como presuntos autores de los delitos de homicidio y conformación de "grupos paramilitares". Por su parte, la Procuraduría General de la Nación mediante decisión del 5 de octubre de 1998 ordenó la apertura de investigación disciplinaria contra nueve miembros del Ejército Nacional; diecisiete miembros de la Policía Nacional; el presidente del concejo municipal de Rionegro y un ex alcalde del municipio de Guarne."

Premios Gregorio 2010

La programación del Primer Encuentro de Cronopios, además de los eventos de tertulias literarias y musicales, muestras plásticas y visuales y el bazar gastronómico y artesanal, contará con un acto especial para la entrega de los Premios Gregorio como estímulo y reconocimiento de los cronopios y sus obras. Para tal efecto se abre la convocatoria en su primera edición con el propósito de fomentar la creación artística y el reconocimiento de los Cronopios en dos modalidades:


Premio Gregorio a La Escritura a un grupo de 3 textos breves que aborde los motivos cortacianos de instrucciones, ocupaciones, e historias de cronopios en narraciones que tengan por contexto a La Ceja del Tambo.


Premio Gregorio por Reconocimiento a toda una vida de cronopio cuya obra e historia sea de significativa relevancia para el arte y la cultura de La Ceja. La postulación debe sustentar estos méritos según la antropología de cronopios formulada por Cortazar.







  • Los textos deberán entregarse en sobre con 3 copias del material con título y seudónimo y en otro sobre sellado con la identificación del autor: nombre y apellido, tipo y número de documento, teléfonos y correo electrónico. Las postulaciones al Cronopio por reconocimiento se deben enviar al correo electrónico lacejadetantos@gmail.com
  • El Jurado lo conformarán tres personalidades competentes en cada modalidad y a cuyo criterio podrá consultar a los autores para analizar las obras finalistas.
  • El Premio único para cada modalidad será una estatuilla del Gregorio y una dotación económica de docientos mil pesos para la Escritura y trecientos mil pesos para el Reconocimiento.
  • Los trabajos serán publicados por la cadena de blogs de La Ceja de Tantos y sus derechos de autor para esta publicación se considerarán saldados en la dotación económica del premio.
  • El plazo y lugar de la entrega de trabajos se definirá y publicará una vez que el comité de producción reúna los recursos financieros para esta cronopiana empresa.

Danzas del amor

El espectáculo que ofreció el XVII Festival Internacional de Danza por Pareja nos dejó tan emocionados como para exclamar que la música es el coito por excelencia del arte y la danza su más excitante orgasmo. Con la música surgen los ángeles y demonios que toman posesión de los cuerpos, ya en bailes cordiales de cortejo o en agitados arrebatos de pasión buscando apareamiento, recreando el rito fundamental y eterno del amor.





Las eróticas coreografías exhiben nuestra latinoamérica multiétnica y pluricultural en su rico abanico de ritmos musicales y su colorida expresión de vestuarios y rasgos étnicos: Son de tambores, corazón de negros, aire de zampoñas, pasitos peruanos, rasgueo de charango y carnavalito del altiplano, pájaro en celo, taconeo apasionado, jarabe tapatío, danza de yegua domada, joropo del Casanare, guabina de tiple y de bandola, muchacha de ojos de gata golosa...





Aunque las muestras del festival en el Parque y la Central de Transporte fueron algo tímidas para el alcance que este espectáculo tiene para impresionar a la comunidad desprevenida, el remodelado Teatro Aranzazu demostró sus condiciones para presentar eventos tan espectaculares como esta danza de parejas y de paso formar un público a la altura de ellos.

Fotografías: Jorge David Higuita

Fervor de la danza

Fotografía: Jorge David Higuita




Fiesta de cronopios

Si para San Juan el espíritu sopla donde quiere, por alquimia y capricho del aire, del agua y de la luz surgen cronopios frágiles, efímeros y brillantes como pompas de jabón. Esas criaturas familiares de las hadas y los elfos se mueven infantilmente por las nubes, amigos de los globos de papel y las cometas de caña. Tienen un aire de poeta sin peso y un arte de vuelo sin alas. Sus expresiones son novedades del arte sin etiquetas ni fronteras entre la forma sublime y la popular expresión: Si no logran escribir poemas procuran hacer pameos y meopas, si no un canto de sirenas una tonada de gorrión, sino le aprueban un óleo para galería esta bien el reprobable grafiti callejero, si no alcanzan méritos para una escultura clásica les basta una artesanía de barro o de tela, un collage de frutas o una torta de nueces; sólo perlas, esencias, golosinas y menudencias de nuestra cultura con el solo y simple propósito de entretener.

El primer encuentro de cronopios será una fiesta que reunirá los más singulares exponentes de nuestro arte popular y espontáneo en un ramillete variopinto y multiforme de talentos y de obras: Canciones inefables y ligeras, anécdotas históricas o legendarias, encantadoras expresiones musicales, inquietantes ejecuciones plásticas, ficciones literarias y cinematográficas, personajes maravillosos y fantásticos del drama y la comedia de hoy y de siempre.

En las próximas ediciones nos referiremos a las nominaciones al Premio Gregorio 2010 de los más extraordinarios cronopios cejeños y las bases del concurso "Memoria de cronopios"

Danzas de América